viernes, 3 de noviembre de 2023

404.- LAS DIATOMEAS.

         


                                          LAS DIATOMEAS

        Las diatomeas, denominadas Bacilariofíceas, son un grupo de algas unicelulares que, constituyen uno de los tipos más comunes de fitoplancton, Contiene actualmente unas 20 000 especies vivas, las cuales son importantes productores dentro de la cadena alimenticia. Una característica especial de este tipo de algas es que se hallan rodeadas por una pared celular única hecha de sílice opalino (dióxido de silicio hidratado).

        Las comunidades de diatomeas son una herramienta usada recurrentemente para la vigilancia de las condiciones medioambientales, de la calidad del agua y en el estudio de los cambios climáticos.


        Las diatomeas son microorganismos foto-sintetizadores que forman parte del fitoplancton. Como colonizadores, las diatomeas se distinguen por encontrarse en cualquier cuerpo de agua, es decir en ambientes de aguas marinas, aguas dulces e incluso terrestres sobre superficies húmedas.

Las diatomeas, unas algas microscópicas que no superan en tamaño a un cuarto del diámetro de uno de tus cabellos, son las responsables de proveer el oxígeno de una de cada cinco respiraciones que realizas y, seguramente, te has tragado alguna en un paseo a la playa, río o lago, ya que se encuentran en una alta proporción en todo el mundo.



Como ya hemos mencionado, son algas fosilizadas que se utilizan en forma de tierra y con distintos usos, como fertilizantes orgánicos y naturales o insecticidas ecológicos para los cultivos, entre muchos otros usos habituales.



Las diatomeas también han sido un componente crucial en la formación de petróleo marino. Del mismo modo que la madera de los árboles acaba transformándose en carbón mineral fósil, una fracción de la biomasa de fitoplancton, principalmente de diatomeas, se acumula en los sedimentos marinos que, con el tiempo, se convierten en petróleo.



Las diatomeas son importantes “bioindicadores” de la calidad del medio en donde viven debido a que manifiestan diversos límites de tolerancia a diferentes alteraciones del medio ambiente. Se les considera como organismos indicadores de contaminación en un medio acuático y, por lo tanto, y por estas cualidades, las diatomeas se utilizan para evaluar el cambio climático a través de las condiciones ambientales.



En la dinamita está presente como medio sólido el barro o tierra de diatomeas. La dinamita es un explosivo muy potente compuesto por nitroglicerina, una sustancia explosiva líquida a temperatura ambiente y muy inestable que al ser absorbida en un medio sólido (inicialmente, diatomita, roca formada por caparazones silíceos de diatomeas), se convierte en un explosivo más estable.